Problemas para tomar decisiones?
TIENES PROBLEMAS A LA HORA DE TOMAR DECISIONES?
La incapacidad para tomar decisiones puede conllevar importantes interferencias en tu vida social y laboral. No seas inseguro, descubre cómo coger el toro por los cuernos y aprender a tomar tus propias decisiones.
Cuando estamos frente a una situación que consideramos difícil en nuestra vida personal o profesional, muchas veces la toma de decisiones puede causar estrés, ansiedad e confusión incluso depresión.
Por ello, al estar frente a una decisión difícil que debemos tomar buscamos formas de evitar tomarla o la postergamos y preferimos enfocarnos en cosas sobre las cuales sí tenemos control o sí nos sentimos cómodos.
Cuando hablo de tomar decisiones difíciles me refiero a tomar decisiones en las que:
· No sabemos cual de todas las opciones es la mejor. (Todas tiene cosas buenas y cosas malas, son diferentes pero no hay objetivamente una opción mejor que otra)
· El rumbo de nuestra vida y/o de la vida de personas importantes va a cambiar mucho en función de la opción que elijamos.
· Nos hacemos una idea de cual sería la opción mas acertada sin embargo si sale mal tendría consecuencias que no nos gustaría asumir.
La toma de decisiones es una tarea implícita en la vida del ser humano desde sus orígenes. En todos los tiempos y culturas el ser humano ha tenido que hacer elecciones sobre diferentes aspectos de su vida cotidiana. En nuestro día a día la toma de decisiones es una tarea que debemos asumir. No hacerlo puede traer repercusiones importantes puesto que la toma de una u otra decisión deja de ser el problema para serlo el hecho de no haberla tomado.
Pero, ¿cuáles son las razones por las que es tan difícil tomar decisiones?
1. El miedo
Muchas personas sienten miedo de que tomarán una mala decisión pero tú debes recordar que el verdadero fracaso es no estar en control de tus propias decisiones.
Inevitablemente tú debes tomar esta decisión y postergarla no cambiará nada. Debes reconocer que la parte más complicada de tomar una decisión es tomarla pero que, una vez tomada, todo lo demás es sencillo.
2. La inseguridad
Muchas personas creen que las decisiones deben ser tomadas con completa seguridad. Creen que antes de tomar una decisión se deben saber todas las posibles consecuencias y opciones y esta creencia evita que tomen una decisión.
La verdad es que la decisión debe ser tomada en base en las mejores o mayores probabilidades. Si esperas a que lo sepas todo o tengas todas las opciones, será muy tarde.
3. La falta de costumbre
Esto se convierte en un círculo viciososo del cual es complicado salir por lo que si no estás acostumbrado a tomar decisiones debes empezar a tomarlas más seguido. ¿Por qué? Porque la única forma de ser bueno o ser buena al tomar decisiones es tomándolas.
Lo que puedes hacer es empezar a tomar decisiones pequeñas pero con frecuencia. Empieza a decidir rápidamente qué ropa ponerte, a qué restaurante ir a comer, qué ruta tomar.
De esta forma fortaleces tu músculo de la toma de decisiones y pronto se te hará más sencillo tomar decisiones más complicadas como ¿asciendo a esta persona o no? ¿contrato a esta persona? ¿me mudo? ¿termino esta relación? ¿renuncio?
4. El estrés
En la sociedad actual, cuando la información nos bombardea por todos lados, en nuestro correo electrónico, en nuestro celular, en las calles, es común que nos cause estrés no saber siquiera por dónde empezar.
De hecho, cuando estamos frente a una decisión no sabemos qué hacer o cómo empezar y este sentimiento crece conforme pasa el tiempo.
Por esta razón es sumamente importante que tengamos un sistema de toma de decisiones que nos facilite el proceso y que nos permita aprender más de cada decisión que tomemos.
¿Cómo tomar decisiones?
Las estrategias básicas de toma de decisiones son las siguientes:
1. ¿Qué es lo que harías si no tuvieras miedo?
No estoy diciendo que lo hagas, el miedo sirve para protegernos y si no tuviéramos miedo lo mas probable es que ya estuviéramos muertos. Pero probablemente reflexionar acerca de lo que harías si el miedo no estuviera en tu repertorio de emociones puede ayudarte a ver en que dirección esta la opción mas adecuada.
2. ¿Cuales son tus valores?
¿Dónde te ves dentro de 5 años? Es muy importante que la decisión que tomes este alineada con tus valores ya que si no lo más probable es que no te haga feliz. Si tomamos una decisión contraria a lo que queremos ser y hacer con nuestra vida probablemente esté determinada por algún miedo que sea importante trabajar y detectar antes de tomar la decisión.¿Crees que te hará feliz trabajar 12 horas al día si uno de tus valores es la importancia de compartir tiempo con tu familia?
3. ¿Qué es lo peor que te puede pasar?
Sí, ponte en lo peor que te pueda pasar y recréate en ello. ¿Realmente sería tan horrible? ¿Sería para siempre o solo implicaría un bache malo? ¿Crees que podrías superarlo? ¿Sobrevivirías? ¿Le ha pasado a alguien antes que a ti? ¿Ha sobrevivido? Lo mas probable es que después de hacerte estas preguntas llegues a la conclusión de que lo peor que te puede pasar si bien es desagradable no seria una catástrofe que acabara en apocalipsis.
4. No ignores a tu intuición.
Tampoco me atrevería a decir que te dejes guiar por ella. No se exactamente qué es, ni si siempre te va a llevar por el camino adecuado. Pero escucharla probablemente te de alguna pista de cual es la dirección a seguir.
5. No esperes a estar demasiado seguro.
No tienes porqué estar 100% seguro de que una opción va a ser la mejor ya que si esperas a estarlo lo mas probable es que nunca hagas nada. En la vida no hay nada 100% seguro y sí, siempre existe posibilidad de que te equivoques, pero recuerda que eres humano y que no eres perfecto así que no te quites tu derecho a equivocarte.
Si aun habiendo leído este artículo, sientes que no tienes las herramientas para superar tu dificultad para tomar decisiones, no lo dudes y llámanos. Nuestros psicólogos en Mataró, con su amplia experiencia, te ayudarán a superar esta dificultad que probablemente tanto tiempo lleva causándote problemas en tu vida.
Cristina Martínez Viana
Directora y psicóloga del Gabinet Psicològic Mataró