Síndrome amotivacional
La aparición de este síndrome se debe al consumo habitual de marihuana en dosis
regulares y su?cientes para producir intoxicación durante un periodo mayor de seis meses.
Pudiendo provocar en los jóvenes una sintomatología caracterizada por la pasividad,
apatía, conformismo, aislacionismo, introversión, pérdida de los ideales y de las ambiciones
personales, falta de emoción o interés en las cosas, indiferencia por lo que ocurre en su
alrededor, desgana y falta de cuidado en su arreglo personal, así como disminución de
funciones cognoscitivas como la concentración, la atención, la memoria, la capacidad de
cálculo, así como el juicio autocrítico y heterocrítico. A este cuadro se le conoce como el
síndrome amotivacional.
¿Cómo identificar el síndrome amotivacional?
Los adolescentes que fuman marihuana de forma habitual, después de un tiempo (entre seis
meses y un año) empiezan a manifestar un comportamiento especí?co que la mayoría de las
veces se achaca a otras causas.
El primer síntoma, es la transformación del carácter. Un chico que antes de consumir
marihuana era sociable extrovertido, podría convertirse en un individuo aislado, solitario y
ensimismado. Dicho aislamiento se evidencia principalmente en el ámbito familiar, dejando
de comunicarse. Con cambios en su forma de vestir, volviéndose descuidado y desaseado.
A nivel escolar manifestando problemas de indisciplina con sus maestros, compañeros y el
reglamento escolar. Su rendimiento también puede verse alterado por la disminución de sus
funciones cognoscitivas. Suspendiendo asignaturas o no se presentándose a los exámenes.
El absentismo escolar también es un fenómeno característico del síndrome amotivacional.
Como consecuencia de lo anterior, el alumno casi siempre abandona total o parcialmente sus
estudios. Produciéndose un declive académico. La falta de metas, de rutinas y la inactividad se
convierten en campo de cultivo para problemas como el consumo de otras drogas.
Es importante la detección oportuna ya que en la mayoría de los casos, el comportamiento
característico del consumidor crónico de cannabis se achaca a otros fenómenos como la crisis
del adolescente, la rebeldía natural y la necesidad de llamar la atención, pero no debemos
olvidar que en España el cannabis sigue siendo la droga ilegal más consumida, y la mayor parte
de sus consumidores tienen un rango de edad entre los trece y veinticinco años.
A nivel familiar o escolar es muy común negar esta realidad. La familia pre?ere achacar las
transformaciones de su hijo a los motivos antes mencionados, y la escuela siempre a?rma
que en ella no existen problemas de consumo de tóxicos. No es necesario que exista un
alto consumo de marihuana para que se presente un síndrome amotivacional. Cuando este
síndrome es detectado oportunamente, el joven puede recibir ayuda para abandonar el
consumo de la droga y continuar sus estudios.
La necesidad de una pronta detección e intervención es fundamental, con el fin de hacer una
detección precoz de lo los hábitos de consumo que presenta el afectado y modificar estos por
otros hábitos saludables.